Y de repente fue ayer - Boris Izaguirre

Amor y desengaño

La novela posterior a un gran éxito, como fue Villa Diamante, es un gran reto. Que tenga el mismo tirón que la anterior depende de muchos factores. Algunos no dependen tan siquiera del autor y van más allá de la obra en sí; pero en cualquier caso, lo que sí se espera es que la novela mantenga al mismo nivel. Es decir, que no se pretenda hacer tragar al lector con una novela que se sostiene con cuatro puntadas, echa a prisa y corriendo para aprovechar la estela del éxito anterior.

Y de repente fue ayer se publicó dos años después de la Finalista del Premio Planeta. Aquella no fue la primera de Izaguirre, pero sí la que ha supuesto un antes y un después permitiéndole que el gran público le conociera como un escritor serio, capaz y con estilo. Un estilo que vuelve a demostrar con Y de repente fue ayer. Una novela exigente, con un aroma similar a Villa Diamante, con un guapo y un feo como protagonistas; pero con una historia mucho más elaborada. Esta vez en Cuba.

Boris Izaguirre (Caracas, 1965) es un conocido y reconocido profesional que se desenvuelve en diferentes medios y con distintas facetas. Televisión, radio y escritor de novelas (Azul petróleo, El vuelo de las avestruces, 1965, Villa Diamante, Dos monstruos juntos), ensayos (Morir de glamour, Verdades alteradas, Fetiche, El armario secreto de Hitchcock), guionista de telenovelas en su país natal y columnista en El País, Fotogramas y Vanity Fair. En su momento dije de Villa Diamante que era “como ver una de las mejores telenovelas venezolanas en pantalla de papel y filmada con estilográfica”, y la misma sensación he tenido en esta ocasión. Con una historia que comienza con la dura infancia de Óvalo y Efraín, y que se va desarrollando en la convulsa sociedad cubana que hace tambalear el mundo de sus protagonistas cuando la propia Cuba de Batista se tambalea al paso de la revolución de Fidel Castro. Entre secretos, amores cruzados y pasiones, se nos muestras los comienzos de la telenovela en los años 50 de la mano de Efraín, el feo protagonista de esta historia, que se ve cercado en una sucia trama política provocado por su amigo de la infancia, el carismático y bello Óvalo.

Así, con la revolución cubana de fondo y en primer plano la amistad de sus dos protagonistas encadenados a un amor platónico, Izaguirre reivindica nuevamente su habilidad para envolver al lector en escenarios, sentimientos y situaciones como si formara parte de la historia. Y de repente fue ayer, una historia de amor que no defrauda.

Contraportada:

«Y de repente fue ayer» es la historia de dos amigos, Óvalo y Efraín, que verán cómo un huracán une sus destinos y los lleva a transitar por un país, Cuba, que con el tiempo aprenderán a dominar usando diversos métodos. El carismático Óvalo lo logrará mediante la revolución política. El desgarbado Efraín se encargará de llevar a cabo otra revolución, tal vez, más poderosa: la creación de un nuevo género, la telenovela. Aurora no es la única mujer que los une, pero su enigmática presencia marcará una constante en la vida de los dos hombres.
Una vez más, Boris Izaguirre describe con maestría una historia de amor fascinante donde la realidad juega el papel del desengaño.

[Primer Capítulo - Leer]

Y DE REPENTE FUE AYER

Boris Izaguirre

Planeta, 2009

575 Págs.

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