Sobre el buen periodismo
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| Los cínicos no sirven para este oficio. Ryszard Kapuscinski |
“La relación con los seres humanos es el elemento imprescindible de nuestro trabajo”. Sobre esta línea gira el eje principal del libro y obra de Kapuscinski, un ensayo que recoge diferentes temas, todos desde el punto de vista del periodista.
Ryszard Kapuscinski (1932-2007), natural de Polonia, fue nombrado, de hecho, Mejor Periodista Polaco del Siglo XX (1999) y recibió el Príncipe de Asturias de Comunicación y Humanidades (2003) entre otros importantes galardones a lo largo de su carrera. Autor de El Emperador, El Sha, El Imperio, Ébano o la que considera su mejor obra Un día más con vida, es respetado como maestro del reportaje. Sus ensayos recogen sus propias experiencias como reportero en los conflictos de África y países subdesarrollados. Con un trabajo humano y profesional se ha erigido en reportero de los que no tienen voz, de los olvidados, de la pobreza y las miserias del mundo. La voz de los que sufren una guerra.
Los cínicos no sirven para este oficio dedica un apartado para el repaso de la historia reciente de África en una entrevista que el periodista y fotógrafo Andrea Semplici realiza a Kapuscinski, testigo presente de la evolución del país. El libro recoge además un encuentro moderado por María Nadotti con el escritor y crítico de arte John Berger.
El discurso de Kapuscinski, acerca de su visión de los medios de comunicación y el periodismo, revela la clave para ejercer el oficio de comunicador: “ser buenos seres humanos”. Compartir al menos un tramo de la vida para poder hablar y escribir de una persona. Así es como ha hecho el autor para contar la situación de los países en los que ha estado, sumergiéndose en ellos como un ciudadano más y no un periodista o extranjero.
Así es como se transmite y se cuenta la realidad de lo que sucede en el mundo.
Ryszard Kapuscinski (1932-2007), natural de Polonia, fue nombrado, de hecho, Mejor Periodista Polaco del Siglo XX (1999) y recibió el Príncipe de Asturias de Comunicación y Humanidades (2003) entre otros importantes galardones a lo largo de su carrera. Autor de El Emperador, El Sha, El Imperio, Ébano o la que considera su mejor obra Un día más con vida, es respetado como maestro del reportaje. Sus ensayos recogen sus propias experiencias como reportero en los conflictos de África y países subdesarrollados. Con un trabajo humano y profesional se ha erigido en reportero de los que no tienen voz, de los olvidados, de la pobreza y las miserias del mundo. La voz de los que sufren una guerra.
Los cínicos no sirven para este oficio dedica un apartado para el repaso de la historia reciente de África en una entrevista que el periodista y fotógrafo Andrea Semplici realiza a Kapuscinski, testigo presente de la evolución del país. El libro recoge además un encuentro moderado por María Nadotti con el escritor y crítico de arte John Berger.
El discurso de Kapuscinski, acerca de su visión de los medios de comunicación y el periodismo, revela la clave para ejercer el oficio de comunicador: “ser buenos seres humanos”. Compartir al menos un tramo de la vida para poder hablar y escribir de una persona. Así es como ha hecho el autor para contar la situación de los países en los que ha estado, sumergiéndose en ellos como un ciudadano más y no un periodista o extranjero.
Así es como se transmite y se cuenta la realidad de lo que sucede en el mundo.
LOS CÍNICOS NO SIRVEN PARA ESTE OFICIO
Ryszard Kapuscinski
Anagrama
128 pags.
Amazon Kindle - Tapa blanda
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